EXPOSICIÓN WORLD UNSEEN (MUNDO INVISIBLE)
«Future» (Futuro), de Ian Treherne
El impresionante retrato del fotógrafo ciego Ian Treherne de la modelo con discapacidad Olivia Deane
EXPOSICIÓN WORLD UNSEEN (MUNDO INVISIBLE)
El impresionante retrato del fotógrafo ciego Ian Treherne de la modelo con discapacidad Olivia Deane
Escucha cómo Ian Treherne describe su propia fotografía
En este retrato fotográfico, vemos a una mujer joven mirando con entusiasmo hacia la parte superior derecha del encuadre. Como la mayoría de mi obra, es en blanco y negro. Los tonos claros de su piel suave y su cabello ondulado, que le llega por debajo de los hombros, se compensan con un fondo negro profundo y la parte superior oscura.
Está ligeramente inclinada hacia la izquierda, con la cabeza mirando en sentido opuesto por encima del hombro. Tiene unas cejas bien pobladas y oscuras, y labios finos. Mientras su ojo izquierdo, en nuestro lado derecho, mira con confianza a media distancia, el otro ojo está ausente.
La imagen es una sinfonía de luces y sombras que compiten por la supremacía. Las zonas más claras están en su cara, la punta de la nariz y el hombro expuesto, ligeramente a la derecha del centro. La parte superior oscura y el cuello, inalcanzables por la luz, son casi tan oscuros en la sombra como el fondo negro.
Me llamo Ian Treherne. Soy una persona ciega y sorda, ya que nací con el síndrome Usher RP tipo 2. Hice esta fotografía de la modelo con discapacidad Olivia Deane con la cámara 7D de Canon y un objetivo de 17 mm – 40 mm.
Siempre me encantó la sensación de ver una imagen, especialmente en blanco y negro, porque hay algo en los tonos monocromáticos que dan la sensación de que el tiempo se detiene.
Cuando tenía 15 años, los médicos me dijeron que estaba perdiendo la vista, algo que me impactó profundamente. Me superó el miedo y la urgencia, y sentí la necesidad de ver y hacer lo máximo posible. Gracias a mi persistencia, coraje y determinación, conseguí mi sueño de ser fotógrafo. Aprendí a base de ensayo y error, estudiando por mi cuenta y aprendiendo de los grandes artistas fotográficos del siglo, como Nadar.
Dar un paso es difícil siendo una persona ciega, en sentido literal y figurado. Me siento vulnerable y tengo que trabajar más que los demás para cumplir mi papel como ser humano, para participar en la vida y en la sociedad.
Ian Treherne realizó este retrato en blanco y negro de Olivia Deane con la EOS 7D de Canon.
Veo y siento el mundo de manera diferente a través de mi limitada visión, experimentando la realidad a través de la oscuridad y usando mis sentidos para guiarme por los desafíos de la vida.
La fotografía es muy importante para mí, ya que me permite construir un puente para conectar con las personas. Mi comprensión del mundo, así como los obstáculos de ser ciego, se canalizan a través del objetivo para sacar lo mejor del espectador, y para crear un retrato sincero de alguien con sentimientos auténticos.
Mi enfoque de la fotografía en blanco y negro está inspirado en las películas mudas que veía en mi infancia. Nací con sordera profunda, por lo que me gustaban las películas sin diálogo y me centraba en las imágenes en movimiento.
Mi amor por el cine siguió creciendo, lo que me llevó a ver películas noir de directores emblemáticos como Orson Welles, Carol Reed y David Lean. Por otro lado, me enamoraré del trabajo de grandes directores modernos como Stanley Kubrick, Martin Scorsese y Wes Craven, y estudié su trabajo de cámara y cinematografía.
También soy daltónico, pero me seguiría gustando la fotografía en blanco y negro aunque no lo fuera. Esto permite reducir el ruido del color, y centrarse en el contraste, los tonos medios y las zonas iluminadas que forman las siluetas e ideas de una imagen.
En el retrato fotográfico, la fuerza de la personalidad transmite el carácter del sujeto, convirtiendo lo ordinario en algo extraordinario. Espero que eso sea lo que sientas con el retrato de Olivia.
Es una madre primeriza de un niño llamado Kaito, y perdió el ojo derecho por culpa de un cáncer llamado «retinoblastoma» cuando tenía 14 años. La enfermedad se suele diagnosticar en niños menores de cinco años, lo que la convierte en la persona de mayor edad a la que le han diagnosticado esta rara enfermedad.
Siempre me encantó la sensación de ver una imagen, especialmente en blanco y negro, porque hay algo en los tonos monocromáticos que dan la sensación de que el tiempo se detiene».
Olivia me dijo que su ojo ausente es lo que más le gusta de sí misma. «Me ha empujado a hacer todas las cosas que he logrado en los últimos años», aseguró. «Me ha puesto en el lugar más feliz en el que he estado jamás».
Llamé a esta imagen «Future» (Futuro) por quién es Olivia y por lo que quiere lograr. Me contó cómo quiere inspirar y alentar a las personas con discapacidad a aceptar sus diferencias y desafíos. Su objetivo es modernizar la sociedad en la que vivimos y crear un futuro del que la próxima generación esté orgullosa.
Al igual que Olivia, acepto mi discapacidad, convirtiéndola en una parte instrumental de mi trabajo. Me autodenomino «fotógrafo ciego», no solo para inspirar, sino para desafiar a la sociedad a replantearse cómo se perciben las personas ciegas en general.
Sabía que llamaría la atención de la sociedad, ya que no se ajusta a la norma, y que se pondrían en cuestión ciertos conceptos. Quiero mostrar e inspirar a otras personas ciegas que tal vez hayan pensado en coger la cámara, pero temen que no se les «permita» perseguir su creatividad por miedo a los estereotipos y las percepciones.
La ceguera es un espectro. El estereotipo común se basa en un pequeño porcentaje, que a menudo se interpela, cuestiona y juzga por lo que hace en la sociedad.
Como persona ciega, te ponen etiquetas constantemente. Al igual que Olivia ha aprovechado su discapacidad, mi naturaleza rebelde siempre ha rechazado dejarse encasillar por las percepciones de otras personas.
No puedo negar que ser ciego es difícil, pero encuentro inspiración en todas partes. No solo de fotógrafos, sino también de deportistas con discapacidades. Lo que tenemos en común es que utilizamos una mentalidad diferente para cambiar las reglas y romper los estereotipos tradicionales que acechan en la sociedad.
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