Para muchas personas, la fotografía y la videografía son algo más que un trabajo o una pasión. Es como una inquietud que nunca termina de calmarse y que les impulsa a visitar lugares remotos, soportar el calor más extremo y superar cualquier reto físico. Son capaces de preparar meticulosamente durante horas una escena que han imaginado de antemano y llevar su equipo y su propia capacidad de resistencia al límite. Nada que es suficiente si no es perfecto.
A continuación, tres profesionales de la fotografía (un videógrafo de aventuras, una fotógrafa gastronómica y una artista visual) nos cuentan cómo su incansable creatividad les lleva a límites insospechados en busca de la toma perfecta.
¿Hasta dónde serías capaz de llegar? Conoce a tres profesionales de la fotografía que buscan llevar su creatividad al límite
Jake Baggaley: videógrafo de viajes y aventuras
Jake Baggaley siempre ha sido un apasionado de los deportes de aventura. Comenzó su carrera profesional como fotógrafo de proyectos editoriales y documentales, pero no tardó en darse cuenta de que podía combinar su amor por la fotografía con el deporte. «La mayor parte de mis proyectos actuales son cosas divertidas que me interesa hacer», afirma Jake a pesar de que, para muchas personas, su idea de diversión (recorrer selvas tropicales o colgarse de un saliente en una montaña) puede ser un tanto extrema. «Me gusta meterme de lleno en la escena que busco captar para plasmarla desde la perspectiva del deportista.
»Si se trata de una escena de escalada, por ejemplo, en vez de fotografiar o grabar al sujeto desde lejos, yo también me sumo a la actividad. Quiero que mis imágenes transmitan una sensación más íntima, como si formaras parte de la acción», añade. «Cuando se trata de imágenes de atletas, hago lo mismo, corro a su lado». Gracias a su experiencia como corredor de montaña, actividad que sigue practicando en la actualidad, Jake cuenta con una buena condición física, lo que le permite afrontar cualquier desafío.
Uno de los proyectos más complicados en los que tuvo que trabajar consistió en captar imágenes de un grupo de esquiadores para una marca de ropa en unas montañas de Suecia. Cuando Jake y su equipo llegaron a la cabaña en la que iban a alojarse tras caminar durante horas con todo el material a cuestas a temperaturas de -10 °C, descubrieron que no podían entrar. «Al final tuvimos que reventar la cerradura», comenta entre risas.
En Borneo, en cambio, se vio en una situación completamente diferente. «Había mucha humedad y el calor era asfixiante. Tenía que correr por la selva junto a un grupo de atletas mientras fotografiaba desde distintos ángulos y trataba de mantener el ritmo rodeado de fauna peligrosa», recuerda.
En un proyecto para un fabricante de tablas de surf motorizadas, Jake tuvo que grabar un vídeo promocional al amanecer en la costa de Dorset desde un kayak. «Fue una situación extrema, ya que el surfista tenía que acercarse mucho a mí. Había mucho ruido, así que lo más difícil fue comunicarse», comenta. «Además, necesitaba maniobrar el kayak lo más rápido posible para poder captar la escena desde la mejor posición. En este caso, tuve que confiar en que el surfista supiera lo que hacía».
Dada la cantidad de variables implicadas, Jake agradece haber podido contar con la fantástica resolución de la EOS R5 de Canon, ya que le ofrece una gran libertad para recortar las imágenes. En una escena con poca luz como esta, el estabilizador de imagen también le resultó muy útil. «Me permitió grabar con una velocidad más lenta y lograr un ligero efecto de desenfoque a la vez que mantenía la nitidez del sujeto para acentuar la sensación de velocidad», explica.
¿Tienes un equipo de Canon?
Sharon Cosgrove: fotógrafa gastronómica
A primera vista, la fotografía de comida no parece un género excesivamente peligroso. Después de todo, no te obliga a huir de una manada de leones en mitad del Serengueti. Aun así, la fotógrafa residente en Belfast Sharon Cosgrove ha acabado lesionada en numerosas ocasiones tras caerse de escaleras, escalones o sillas destartaladas mientras trataba de captar sus sujetos comestibles desde un ángulo ideal. No obstante, para lograr las innovadoras y apetecibles imágenes por las que es conocida, lo que más necesita es tiempo. «Una sola toma puede llevar varios días de investigación, búsqueda de atrezo y construcción de sets», comenta. Para Sharon, meterse de lleno en un proyecto fotográfico conlleva no poder socializar. Sin embargo, el resultado merece la pena.
Este excepcional nivel de compromiso se puede apreciar en un reciente proyecto que captó con la EOS R6 de Canon en el que dejaba caer comida en agua. Requería habilidad y perseverancia. «Utilicé trozos de fruta de distintos tamaños y los dejé caer desde diferentes alturas mientras probaba varios ajustes de la cámara, y tenía que cambiar litros de agua constantemente», explica. «No fue nada sencillo captar la toma al mismo tiempo que dejaba caer los trozos de fruta. Al final, la clave consiste en saber determinar el momento de disparo y repetir muchas veces. Es algo que requiere paciencia, determinación y visión, además de saber cómo solucionar todo aquello que no funciona. Para lograr una sola toma tuve que dedicar un día entero, pero siempre me gusta seguir adelante sin importar lo cansada que esté».
La EOS R6 fue la herramienta ideal para el proyecto. «Es tan rápida y silenciosa que puedes realizar hacer montones de fotos, como una ametralladora silenciosa. Con esta cámara, no se te escapa ni una toma», comenta con entusiasmo.
Sharon utilizó el modo de disparos en serie de alta velocidad para fotografiar los trozos de fruta antes y después de que alcanzaran el agua, lo que le permitió «captar con claridad cómo cada rodaja atravesaba la superficie y se hundía elegantemente», tal y como ella misma explica. «A veces, una foto puede llevarte varias horas, pero cuando la consigues, es muy emocionante. El modo de disparos en serie me permitió captar perfectamente toda la acción, pero no tardé en acumular miles de imágenes».
Mi compañera de aventura al aire libre: EOS RP de Canon
Eliška Sky: artista visual
Los proyectos de la embajadora de Canon Eliška Sky siempre empiezan con una idea que quiere comunicar. Sin embargo, dicha idea puede tomar cualquier rumbo. Gracias a su tenacidad e imaginación, esta artista, fotógrafa de moda y directora de arte checa es capaz de plasmar en imágenes su fantástica visión creativa. «Me gusta innovar y crear cosas nunca vistas», afirma. «Ser original y sorprendente siempre supone un reto. Es algo que requiere mucha planificación, un equipo numeroso y diseños de escenarios complejos. Pero ¿qué sentido tendría si fuera fácil?».
Según comenta, en uno de sus proyectos tuvo que grabar a una modelo mientras posaba sobre una estructura de plexiglás a dos metros de altura. Para lograr el acabado que buscaba, Eliška utilizó una máquina de aire y varios accesorios, como bufandas y bolas de colores. «En una de las tomas, tuve que colocarme bajo la mesa de plexiglás y, como mi figura siempre se veía reflejada en la imagen, le pedí a alguien que me cubriera con una manta oscura para así poder fotografiar sin problemas», explica. Trabajar con la EOS R5 de Canon le ha permitido comprobar que el sistema de enfoque automático puede marcar la diferencia. «Fue capaz de mantener a la modelo enfocada mientras se movía. Por otro lado, características como la captura de vídeo en 4K y la frecuencia de fotogramas de la R5 también me vinieron geniales para captar las bolas de colores en el aire a cámara lenta».
En otra campaña que realizó en enero de 2021, Eliška construyó una piscina de 6 x 6 m dentro de un estudio. «Estaba en un suelo de hormigón, sin calentar y en pleno invierno. Solo disponíamos de dos días para conseguir las tomas», añade. Para asegurarse de que las modelos estuvieran cómodas, Eliška y su equipo se dedicaron a calentar agua en teteras para rellenar la piscina. Otro ejemplo que pone de manifiesto hasta dónde está dispuesta a llegar para lograr una toma se puede observar en uno de sus proyectos editoriales inspirado en el período azul de Picasso, en el que decidió cubrir con pintura azul brillante a las modelos y el estudio entero. «Encuentro inspiración en todo lo que me rodea», afirma. «La literatura, el cine, la fotografía, lo cotidiano... Incluso algo tan simple como las luces y las sombras resulta inspirador».