Esto incluye también las condiciones nocturnas y con poca iluminación, como al retratar al director y actor canadiense Xavier Dolan. «Cuando estaba en la terraza, sabía que la cámara enfocaría bien. Aunque estaba muy oscuro, incluso con poca iluminación sabes que la cámara puede ver lo que hay, así que puedes confiar en ella aunque no tengas tiempo para comprobar las fotos. Utilicé un plato difusor con un flash suave, exponiendo el fondo y disparando con un valor ISO 100».
El enfoque automático aportó resultados supernítidos a sus imágenes, pero Paolo evitó usar el AF con detección de ojos y prefirió bloquear el enfoque manualmente en los rostros de los sujetos. «No usé el enfoque con detección de ojos de forma deliberada, había demasiada gente en el encuadre. Aunque estuviera delante del sujeto, había maquilladores entrando y saliendo, o gente pasando por allí, por lo que quería que el enfoque de la cámara estuviera fijo en un solo lugar».
Al tener tan poco tiempo con los sujetos, cambiar los objetivos durante una sesión no era una opción. Paolo utilizó un objetivo RF 28-70mm F2L USM de Canon o uno de sus incondicionales objetivos EF de focal fija, el EF 50mm f/1.2L USM de Canon, junto con un adaptador de montura EF-EOS R. «El objetivo RF 28-70mm F2L USM es genial, ya que, cuando tienes que adaptarte rápidamente a distintos entornos, es capaz de ofrecerte una gran flexibilidad», comenta. «Con el adaptador de montura EF-EOS R se pueden usar una gran variedad de objetivos. Utilicé un objetivo EF 50mm f/1.2L USM y, a veces, un EF 85mm f/1.2L II USM, con los que funciona muy bien, porque ya los tenía».