De estudiante de fotografía a profesional: la carrera fotoperiodística de Michele Spatari

Pasar de estudiante de fotografía a fotoperiodista profesional no es fácil. Para este trabajo, es esencial tener esa pasión por la fotografía, capacidades para capturar imágenes potentes e infinidad de ideas originales. Sin embargo, desarrollar una red de contactos y recibir consejos y mentorías de fotografía de profesionales sénior también es fundamental para ayudarte a establecerte.

El fotógrafo italiano Michele Spatari es uno de lo que ha conseguido pasar de graduado en fotografía a profesional. Tras completar sus estudios, participó en el Programa de desarrollo para estudiantes de Canon de 2018 y ahora es fotógrafo autónomo, siendo su principal cliente la agencia de noticias global Agence France-Presse.

Ahora vive en Johannesburgo (Sudáfrica), donde ha cubierto los principales eventos de noticias mientras trabaja en sus proyectos documentales personales. Sus imágenes han salido en publicaciones como The New York Times, The Washington Post y la revista TIME, y ha trabajado para organizaciones como UNICEF y el Fondo Mundial para la Naturaleza. También le seleccionaron como embajador de Canon en 2020.

Cuando terminó su formación en arquitectura, Michele empezó a ponerse en contacto con gente para convertirse en fotógrafo. Uno de ellos fue el embajador de Canon Marco Longari, ya que Michele admiraba especialmente su cobertura de la Primavera Árabe, desde 2010 hasta 2014.

«Marco fue muy amable y me respondió», cuenta Michele. «Me dijo que tenía ideas y pasión, pero que mi fotografía era mala. Me aconsejó que me formara en fotoperiodismo y fotografía documental». Michele continuó e hizo un máster en Fotoperiodismo en ISFCI (Roma).

Al final del curso, Michele había completado un proyecto a largo plazo sobre las duchas públicas y la crisis inmobiliaria de Turín, por el que ganó el premio Young Photographer Award de Canon Italia. Pero recalca que «todavía no formaba parte del sector». Necesitaba dar el siguiente paso.

Para avanzar en su carrera de fotografía, Michele envió la solicitud para participar en el Programa de desarrollo para estudiantes de Canon de 2018.

El programa ofrecía la posibilidad de asistir al festival internacional de fotoperiodismo Visa pour l'Image en Perpiñán (Francia), conocer a fotógrafos destacados, editores de imagen, conservadores de galerías y otros aspirantes a fotoperiodistas, y participar en talleres y revisiones de porfolios. «Obviamente era una gran oportunidad», afirma Michele.

Como parte de su solicitud, Michele tenía que enviar dos historias fotográficas. Una fue su proyecto sobre Turín, titulado Rising Water, y la otra fue una historia más breve sobre el excéntrico propietario de un club nocturno de cabaret en Roma. Su solicitud triunfó y fue aceptado para participar en el programa.

A cada grupo de participantes se le asignó un mentor, y al de Michele le tocó el fotoperiodista ganador de un premio Pulitzer y embajador de Canon Daniel Etter. Junto con Daniel, el grupo visitó exposiciones, en las que los participantes tenían que mirar a las imágenes en detalle y aportar una crítica constructiva. También revisaron sus porfolios profesionales de manera individual y asistieron a una serie de conferencias con ponentes como Francis Kohn, exdirector de fotografía en Agence France-Presse, y Thomas Borberg, editor jefe del periódico danés Politiken. Además, Michele pudo conocer a Marco Longari en persona, y que le presentara a sus compañeros de AFP.

Para Michele, el Programa de desarrollo para estudiantes de Canon fue importante no solo porque aprendió unas valiosas capacidades, sino sobre todo porque hizo buenos contactos. «Fue una bonita experiencia tanto a nivel profesional como personal», recuerda. «Hice muchos amigos y contactos, gente con la que sigo todavía en contacto hoy en día».

El plazo para participar en el Programa de desarrollo para estudiantes de Canon de 2022 empieza el 28 de marzo. Se seleccionarán 100 participantes, a los que se les asignará un mentor profesional durante el verano. Luego, los 30 mejores asistirán a un taller exclusivo de cinco días en Perpiñán, que coincide con el festival Visa pour l'Image. Por último, se seleccionarán cinco estudiantes para revisar su porfolio en Hamburgo, y recibirán mentorías de seis meses, un kit de Canon valorado en hasta 9000 € y una beca de 2000 €.

Michele recalca las ventajas de la mentoría que recibió. «Una vez que terminas tu formación de fotografía, es más difícil que alguien se tome el tiempo de examinar tus proyectos, comentarlos contigo y darte indicaciones o su opinión», afirma. «La mentoría no es algo a lo que puedas poner precio».

Los contactos formales e informales que Michele hizo durante el programa le llevaron directamente a cubrir las elecciones de 2019 en Sudáfrica para Agence France-Presse, y ha seguido trabajando allí durante los últimos tres años.

«Cuando llegué a Sudáfrica, me centré en aprender las capacidades para ser un buen fotógrafo de noticias», cuenta. «Quería estar 100 % seguro de que podría capturar las mejores imágenes en cualquier situación. Ahora me siento cómodo en la mayoría de situaciones y tengo las capacidades técnicas necesarias para ofrecer imágenes a una agencia de noticias».

Tras un año en el país, Michele retomó sus propios proyectos personales. El primero fue No Place Like Hope, en el que exploraba las consecuencias sociales y económicas de la pandemia de COVID-19 en Sudáfrica. Con este proyecto, ganó el primer premio de la categoría COVID-19 de los premios WARS Photography Awards.

Actualmente, está trabajando en tres proyectos diferentes: Ingozi, una serie a largo plazo sobre el sector en rápida expansión de la seguridad privada en Sudáfrica; Ballads From The End Of The Desert, que describe como «una exploración visual del desierto Karoo sudafricano»; y un documental de vídeo de 15 minutos, grabado en Barcelona, que «trata sobre la necesidad de la belleza que todos percibimos en nuestra vida diaria».

El consejo de Michele para los aspirantes a fotoperiodistas y fotógrafos documentales es que reconozcan que al principio es difícil establecerse, pero si trabajas duro las recompensas personales son grandiosas.

«Es complicado tanto a nivel personal como económico», cuenta. «Los primeros años serán superduros. Pero si realmente sabes lo que estás haciendo, se irá perfeccionando en tu mente. Si tienes la suerte de trabajar en algo que te gusta de verdad, tienes que ser constante y seguir insistiendo. Los proyectos no van a llegar de la noche a la mañana, pero a largo plazo merece la pena».

Para los estudiantes que estén empezando sus carreras profesionales, Michele recomienda apuntarse a cualquier oportunidad disponible, como premios, becas y revisiones de porfolios, y por supuesto al Programa de desarrollo para estudiantes de Canon. «El programa de Canon es especial, pero tienes que aprovechar cualquier oportunidad para mostrar tu trabajo», afirma. «Que no te detenga la timidez, sal ahí fuera y muestra tu trabajo. No hay mejor forma para desarrollarte como fotógrafo o como "storyteller"».

El Programa de desarrollo para estudiantes de Canon ayuda a estudiantes de fotografía de toda Europa, Oriente Medio y África a avanzar en sus carreras y a dar el siguiente paso para convertirse en fotógrafos profesionales.

• Para participar, los estudiantes deben enviar un porfolio de un máximo de 20 imágenes de una historia, junto con una descripción del proyecto y una biografía personal. Obtén más información sobre la elegibilidad, las fechas y los requisitos de admisión.
• Editores de las principales agencias de comunicación, incluidas AFP, Getty Images y Reuters, revisarán las participaciones.
• Se seleccionarán a 100 participantes para recibir mentorías individuales con un profesional destacado, que les orientará para perfeccionar su porfolio durante tres sesiones.
• Luego, 30 participantes podrán formar parte de un taller exclusivo de Canon de cinco días en Perpiñán (Francia), en el que participarán en sesiones prácticas con embajadores de Canon, revisiones de porfolios en grupo y charlas de fotógrafos y editores destacados. Después tendrán la oportunidad de asistir al festival fotográfico Visa pour l'Image.
• Los cinco mejores participantes recibirán una exclusiva plaza en la revisión de porfolios de Hamburgo. Podrán mostrar su trabajo durante las revisiones de porfolios, participar en exposiciones físicas y asistir a una serie de reuniones con editores de imagen internacionales para iniciar sus carreras.
• Además, cada uno de los cinco participantes finales recibirá una mentoría de seis meses, un kit de Canon valorado en hasta 9000 € y una beca de 2000 €.