«Reshaping home: Indonesia's capital migration» es un proyecto en curso de la fotoperiodista danesa Cynthia Boll, destinataria de la beca para mujeres fotoperiodistas de Canon de 2024. «La decisión de trasladar la capital de Indonesia de Jakarta a la ciudad emergente de Ibu Kota Nusantara supone un esfuerzo monumental con implicaciones de gran alcance», explica Cynthia, que utilizará la beca para seguir contando la historia desde la perspectiva de estos ciudadanos pioneros. © Cynthia Boll
La beca para mujeres fotoperiodistas de Canon, creada en el 2000, se entrega anualmente en el festival Visa pour l'Image que se celebra en septiembre. La beca de 8000 € se otorga a «fotógrafas excepcionales como reconocimiento a su contribución al mundo del fotoperiodismo» y está diseñada para ayudarles a acabar proyectos en marcha o para facilitar el desarrollo de uno nuevo, cuyo resultado se exhibirá en el próximo festival.
Para las destinatarias, la beca puede marcar un antes y un después en sus vidas, tanto por la financiación que reciben como por la plataforma que les proporciona a la hora de dar a conocer su trabajo como fotógrafas. El talento de varias destinatarias anteriores también ha sido reconocido a través del premio Pulitzer o de los premios World Press Photo, así como mediante el nombramiento de algunas como embajadoras de la marca y el inicio de la colaboración con publicaciones internacionales de prestigio.
El jurado estaba compuesto por periodistas y editores de The New York Times, Le Monde, Conde Nast, CNN Digital, The Guardian, Magnum y FOAM Magazine, entre otros, y ha concedido a las destinatarias la oportunidad de documentar historias por todo el mundo.
«Esta beca de Canon tiene un valor incalculable. Llegó justo en el momento adecuado», afirma la ganadora de 2020 Sabiha Çimen. Sabiha, fotógrafa documental autodidacta residente en Estambul, se hizo con la beca gracias a su proyecto en curso «Hafiz: the Guardians of Qur'an», que documenta la historia de las chicas musulmanas que intentan memorizar el Corán completo, un total de 30 libros y 6236 versos, cumpliendo con una tradición que se mantiene desde hace casi 1500 años. «Llevo trabajando en este proyecto desde hace tres años y sigo necesitando apoyo para finalizarlo», explica Sabiha.
Más allá de su habilidad para continuar o completar sus objetivos fotoperiodísticos, las destinatarias mencionadas revelan lo que este premio significó para ellas y aconsejan a la próxima generación de participantes.