El combate de revancha entre Ruiz Jr. y Anthony Joshua en Arabia Saudí era un evento muy esperado. «Puedes estimar lo que puede pasar, pero el boxeo también es impredecible la mayoría de las veces», afirma Richard. «Tenía la sensación de que la pelea iba a llegar hasta el final, por lo que habría muchas oportunidades de conseguir imágenes de puñetazos. El EF 24-70mm f/2.8L II USM de Canon es el objetivo estándar para boxeo para que puedas capturar la acción alrededor del ring».
Cuando se desarrollaba el duodécimo y último asalto de la pelea, Richard se sentía frustrado por la posición desde la que estaba fotografiando, a la derecha de los jueces. «Los golpes y las formas de los boxeadores quedaban de medio perfil y resultaban buenas para los fotógrafos que estaban en el otro lado», comenta. «Además, los grandes marcadores LED naranjas que había en cada esquina creaban unos fondos caóticos».
Al final, no obstante, su paciencia se vio recompensada. «Joshua lanzó un cruzado de derecha que quedó muy bien: la cara deformada, las gotitas del puñetazo y el fondo limpio; fue un momento fundamental de la pelea», afirma Richard. «La espera mereció la pena».
Además de fotografiar con la EOS-1D X Mark II, Richard ha sido uno de los primeros en usar su sucesora, la EOS-1D X Mark III de Canon, y le impresionan los nuevos niveles de rendimiento al capturar eventos deportivos. «El AF se ha mejorado mucho, sobre todo con la detección de caras y ojos», comenta. «En eventos recientes, he estado utilizando las áreas de zona AF con la detección de caras y las movía con el controlador inteligente; no se pierde ni un detalle. El ISO alto también ha mejorado en un par de pasos, por lo que ahora podemos fotografiar cuando los eventos cuentan con una iluminación deficiente».