La impresión táctil y la revolución de la accesibilidad

Cuando la CBB, una organización pionera dedicada a hacer accesible la información a las personas ciegas y con discapacidad visual, quiso ampliar su oferta, se enfrentó a un reto: cómo escalar productos táctiles de gran calidad manteniendo al mismo tiempo unos estándares precisos. Especializada en productos de audio, braille, letra grande y materiales táctiles como libros, juegos, tarjetas de felicitación y señalización, la CBB necesitaba algo más que los métodos de impresión tradicionales, que carecían de la precisión y versatilidad necesarias. Necesitaba una solución que diera vida a sus ideas innovadoras con precisión y eficacia. Las impresoras planas Arizona de Canon se convirtieron en la respuesta, revolucionando su misión de crear un mundo sin barreras.

Tras una investigación y colaboración exhaustivas, la CBB, que ya contaba con una impresora de la serie Arizona 1300, decidió adquirir una segunda y actualizarla al nuevo software PRISMAelevate XL. Esta configuración mejorada les permitió no solo cumplir sus objetivos de producción, sino superarlos. Las impresoras Arizona ofrecieron una precisión inigualable en la impresión braille, garantizando el cumplimiento de las estrictas normas del sector hasta las centésimas de milímetro. Además, el software PRISMAelevate XL permitió la creación de intrincados diseños en relieve de hasta 4 mm de altura, añadiendo, literalmente, una nueva dimensión a sus productos.

El impacto fue inmediato y profundo. La capacidad de la CBB para producir braille, letra grande y productos en relieve con una claridad y un detalle excepcionales transformó su oferta de productos. La introducción de libros táctiles para lectura conjunta, que combinaban braille, letra grande, relieve y audio, se convirtió en un producto emblemático, estableciendo un nuevo estándar en medios accesibles. Además, la eficiencia de las impresoras Arizona permitió a la CBB ampliar la producción sin comprometer la calidad, haciendo accesibles a un público más amplio el arte táctil, las fotos e incluso los reproductores de audio diseñados a medida.

Una de las aplicaciones con la que están encantados es crear moldes en la Arizona con el software PRISMAelevate XL. Con la Arizona imprimen un molde positivo y otro negativo, y estos se cortan al tamaño adecuado en la mesa Zünd/ProCut. A continuación, se colocan en la prensa Heidelberg. Después, el papel se prensa entre los dos moldes y así se crean los puntos táctiles en el papel. Los moldes deben ser muy precisos, ya que los puntos tienen que alinearse perfectamente con la impresión realizada en papel.

Para la CBB, las impresoras Arizona de Canon han sido algo más que una simple actualización tecnológica: han sido un catalizador para la innovación, permitiendo a la organización ampliar los límites de lo que es posible en medios accesibles. La asociación sigue prosperando, impulsada por un compromiso compartido con la excelencia y la accesibilidad, garantizando que la información siga estando al alcance de todos, independientemente de sus capacidades.