Innovación sostenible para el cambio a largo plazo
Dado que el mercado está inundado de nuevas empresas e ideas, y que las empresas tienen que trabajar más duro que nunca para seguir siendo competitivas y relevantes, la innovación es más importante que nunca. La innovación mejora la productividad, la eficiencia, la calidad del servicio y la satisfacción del cliente, y, con el uso de tecnologías y procesos nuevos y mejorados, también reduce los riesgos y los costes.
Sin embargo, las empresas no deberían plantearse solo su productividad, ingresos y beneficios; también deberían considerar cómo se posicionan en la sociedad, lo que requiere centrarse en la sostenibilidad ambiental, social y cultural. Aunque la innovación tradicional podría traer consigo rentabilidad y eficiencia para una empresa, también podría dar lugar a la explotación de los empleados, así como de los recursos naturales.
Como resultado, existe una creciente preocupación entre los inversores y los consumidores de que las empresas no solo tengan en cuenta los ingresos y los beneficios, sino también la sostenibilidad de toda la cadena de valor. Esto incluye el impacto en el medio ambiente, así como la sostenibilidad social y económica.
La "innovación sostenible" tiene en cuenta el impacto tanto en el medio ambiente como en la sociedad en su conjunto. La innovación sostenible beneficia a la sociedad y está impulsada por esta, el medio ambiente y la organización a través de un pensamiento a largo plazo que ofrece beneficios sociales y ambientales y genera beneficios económicos para la empresa1. Esto implica el desarrollo de nuevos productos y servicios, así como la revisión y actualización de los procesos operativos en toda la empresa, desde el diseño y la producción hasta la comercialización2.
La innovación sostenible es una forma excelente de preparar tu negocio para el futuro, además de hacer tu empresa más resiliente y orientada a tu enfoque, pues tienes en cuenta a todas las partes interesadas. La sostenibilidad se puede alcanzar de tres maneras: mediante cambios operativos (considerando el cumplimiento y la eficiencia para mejorar los procesos), mediante actualizaciones organizativas (por ejemplo, ofreciendo productos y servicios innovadores centrados en hacer el bien) y a través de la integración de nuevos sistemas, colaborando con otros para crear un impacto positivo en el medio ambiente, así como en la sociedad3.